Torrenueva Costa fue asentamiento de las culturas romana y árabe. Debe su topónimo a su elemento patrimonial más representativo, la Torre Atalaya, construida a mediados del siglo XVIII con el objetivo de reforzar los mecanismos defensivos contra invasiones berberíscas de la costa. Además de este monumento destacan la Iglesia de Nuestra Señora del Carmen, situada frente a la playa, los restos de aljibes romanos de más reciente factura y testimonio del significativo pasado hidráulico de la localidad, así como el yacimiento arqueológico de El Maraute y el Cabo Sacratif, donde se ubica el faro del mismo nombre y que sirve de guía nocturno para los barcos que surcan este rincón del Mediterráneo.
Nnuestro gran tesoro son nuestras playas. Situada en plena Costa Tropical la Playa Urbana de Torrenueva Costa está reconocida con el Certificado Q de Calidad Turística de 2005. Este galardón reconoce la calidad de sus aguas, la educación medioambiental, la seguridad y limpieza de sus instalaciones. También cuenta entre sus distintivos las prestigiosa Bandera Azul junto con la Cardioprotegida, la Medioambiental y la de Playa Accesible, ya que cuenta con sillas anfibias e infraestructuras para personas con movilidad reducida.
La riqueza natural del litoral Torreño ofrece múltiples posibilidades para la práctica de actividades al aire libre incluidos deportes náuticos como el winsurf, submarinismo o esquí acuático. Torrenueva Costa también cuenta con una infraestructura deportiva de primer orden, la zona recreativa Cañada Vargas, donde es posible jugar al paddle y al tenis.
Las fiestas patronales en honor a la Virgen del Carmen se celebran en torno al 16 de julio con un recorrido terrestre y marítimo de su imagen, actuaciones musicales, actividades deportivas y los tradicionales columpios. Además a lo largo del año se celebran numerosas actuaciones de carácter lúdico, cultural, deportivo y medioambiental.
En las terrazas junto al mar se pueden degustar las tapas y platos típicos de origen marinero como las migas con pescado y pimientos fritos,, el caldero y los espetos de sardinas, amén de la tradicional y emblemática leche rizada.